Paradoja
Ayer llovió en el día y en la noche.
Ya ni vi el atardecer, ni el cielo caer.
Era yo aquel, que mas nunca fue,
y en la tarde vi,
luz de tu color entre los montes
cuando se rompe, en la nada
por vana devoción.
Réstale a aquel, nuestra pasión,
y cuando vuelvas a ver,
tal vez será todo una ilusión.